DIEZ DE MES A SANTA FILOMENA

DEVOCIÓN PARA EL DÍA DIEZ DE CADA MES EN HONOR DE LA GLORIOSA VIRGEN Y MÁRTIR SANTA FILOMENA

LA TAUMATURGA DEL S. XIX. 

Compuesta por el Pbro. D. J. M. L.

Especial devoto de la Santa.

Madrid, 1846.

Hecha la señal de la santa Cruz se dirá el siguiente:

 

ACTO DE CONTRICCIÓN

¡Oh amabilísimo Jesús mío, solícito y cuidadoso pastor de mi alma! Vedme aquí postrado ante vuestro divino acatamiento, lleno del mayor rubor y vergüenza por la consideración de las gravísimas culpas con que, ingrato a vuestros beneficios, me eh atrevido a ofenderos, pero ya, Señor, reconocido de mi extravío, os pido perdón, no ya con el frío lenguaje de mis inmundos labios, sino con los penitentes acentos de mi corazón que, arrepentido, desea serviros, y os pide misericordia. Si, dulce Jesús de mi vida, yo detesto de todas veras mis muchas y gravísimas culpas, y os prometo, con los auxilios de vuestra divina gracia, enmendar mi vida y purificar mi alma en el lavacro santo de vuestra preciosísima sangre, por medio del santo sacramento de la Penitencia, y de este modo, firmemente, espero me perdonéis benigno, y que llegará un día en que, protegido por vuestra infinita misericordia, consiga la inexplicable dicha de gozaros en el cielo. Amén.

 

DEPRECACIÓN

¡Oh invicta y gloriosa Santa Filomena! Que coronada por Dios con la duplicada corona de Virgen y Mártir, con vuestra alegría santa e inaudita paciencia, en medio de los atrocísimos tormentos, persuadís al mundo de toda la verdad de la religión santa con obras, palabras, ejemplos y milagros, humildemente os suplico me alcancéis del Todopoderoso una fe tan viva de las verdades eternas, y tan activa de buenas obras que, desprendido mi corazón de todo afecto terreno, venza por esta fé al mundo y demás enemigos de mi verdadera felicidad espiritual, y consiga de Dios por vuestra poderosa intercesión la corona inmarcesible de la gloria, y el favor especial que pido en esta duodena, si conviene a la mayor honra y gloria de Dios y a la salvación de mi alma. Amén.

DIEZ DE ENERO

ORACIÓN

¡Oh dichosísima Santa Filomena! Que prevenida por Dios desde ab eterno, para que llegase un día en el que os aclamásemos por taumaturga de nuestro siglo, no permitió fuese formada en el seno de vuestra madre, ni que vieseis la luz del mundo hasta que vuestros padres abrazaron el catolicismo, y se hicieron hijos sumisos de la Iglesia Santa del Altísimo el que se os pusiese en el santo bautismo el nombre misteriosos de Filumena, que quiere decir hija santa de la luz de la fé, alcánzanos que siempre sumisos a los preceptos del Señor, jamás nos apartemos un punto de cuanto nos enseña y manda creer la Sana Madre Iglesia, fuera de la cual no hay salvación ni salud eterna, para que por este medio consigamos el fin único para que fuimos criados, sirviendo a Dios en esta vida, y gozándole en la eterna por los siglos de los siglos. Amén.

 

ORACIÓN AL ETERNO PADRE

(Para todos los días)

¡Omnipotente y sempiterno Dios! Que enviasteis a vuestro Unigénito Hijo para esparcir la luz de la antorcha brillante de la fé, y alumbrar a los que estaban sentados en las tinieblas de la muerte, y que en la confesión de la verdadera fé habéis dado a conocer a vuestros siervos la gloria y majestad de vuestros santos, yo so suplico humildemente por los méritos y prodigiosa intercesión de vuestra amada sierva, la gloriosa virgen e invicta mártir Sant Filomena, que estuvo adornada de la fé más viva, me concedáis la gracia particular que os pido en esta duodena, si así fuere de vuestro divino agrado, y si no, la que más conviniere a vuestra mayor honra, gloria y bien espiritual de mi alma. Amén.

 

ORACIÓN A MARÍA SANTÍSIMA

Dulcísima e incomparable Madre de Dios y Señora mía, yo, el más indigno y miserable de vuestros siervos y devotos, humildemente os suplico por los méritos de la preciosísima sangre que vuestro Hijo Santísimo derramó por nuestra salud eterna, y por la intercesión de vuestra predilecta sierva Santa Filomena, os dignéis volver sobre mí una mirada compasiva y misericordiosa, para que, interponiendo vuestro eficaz valimiento con vuestro santísimo Hijo, consiga el fruto que me propongo en esta santa duodena, que es el adelanto espiritual en la práctica de las virtudes, para conseguir por este medio, ayudado de vuestra protección y de la intercesión de la gloriosa Santa Filomena, la santificación de mi alma, y después la eterna bienaventuranza de la gloria. Amén.

 

Pues sois de virtudes llena

nueva luz que el cielo envía

Sed nuestra celeste guía

Santa mártir Filomena

 

Prendado de la hermosura

con que os adorno el creador

un romano emperador

vuestro esposo ser procura

como esposa de dios pura

despreciáis pompa terrena

 

Viendo burlado su amor

sin obtener vuestra mano

lo convierte el vil tirano

en perfidia y en furor

a las sombras y rigor

de una cárcel os condena

 

Vuestro cuerpo angelical

con azotes maltratado

piensa iréis ablandando

sí firma celestial

y os encuentra más leal

despreciando llanto y pena

 

del Tíber en la corriente

os condena a ser hundida

con un ancora prendida

de vuestro cuello inocente

dos ángeles de repente

a la orilla os sacan buena

 

El tirano confundido

os hizo en fin degollar

y al cielo vais a gozar

vuestro premio merecido

allí tenéis prevenido

la paz y la gloria amena

 

ANTÍFONA: Ven, novia de Cristo, a aceptar la corona que el Señor ha preparado para ti para siempre.

DIEZ DE FEBRERO

ORACIÓN

¡Oh felicísima niña y bienaventurada Filomena! que conociendo la excelencia y sublimes prerrogativas de la virtud santa de la Castidad, en la primavera de tu vida le consagra este por fiel esposa de Jesucristo, ofreciéndole en arras de tu místico desposorio la cándida azucena del voto santo de perpetua virginidad; alcánzame de tu celestial Esposo me conceda la gracia de la virtud santa de la Castidad, para que, de este modo, ascendiendo de virtud en virtud, llegue un día en que tenga la dicha de ver y gozar al Señor Dios de las virtudes en el cielo por toda una eternidad. Amén.

 

 

DIEZ DE MARZO

ORACIÓN

Gloriosísima Santa Filomena, que conociendo desde vuestros infantiles años la grande obligación que teníais de conservar siempre viva y encendida la antorcha santa de la fé, que recibisteis en el santo Bautismo, de tal modo cumplisteis con este deber santo, que rubricasteis con la roja sangre de vuestras venas la profesión que tan dignamente hicisteis de esta virtud santa todo el tiempo de vuestra preciosa vida; alcanzadme del Señor me conceda la gracia de que, a imitación vuestra, conserve siempre en el fondo de mi corazón esta preciosa joya tan pura y resplandeciente como la recibí de sus divinas manos en el día feliz en que fui engendrado en las aguas saludables del santo Bautismo, para bien espiritual de mi alma. Amén.

 

 

DIEZ DE ABRIL

ORACIÓN

Valerosa heroína de la ley de gracia Santa Filomena, que persuadida de la sentencia del Espíritu Santo que dice:  Maldito el hombre que confía en el hombre, siempre tuvisteis fijos los ojos de vuestra ·alma en solo Dios, despreciando los honores y riquezas que tu ilustre nacimiento te proporcionaba, y el mundo te prometía brindándote con la mano del pérfido Diocleciano, porque conocíais muy bien que no eran otra cosa que el origen de la ruina espiritual de vuestra alma; alcanzadme de la infinita misericordia de mi Dios y Señor me conceda la gracia de un verdadero desprendimiento de todo lo terreno, para que de este modo aspire solo a los bienes eternos de la gloria. Amén.

 

 

DIEZ DE MAYO

ORACIÓN

¡Oh virgen invencible y dichosa víctima del amor divino Santa Filomena! en cuyo corazón ardía tan vivamente el fuego santo de la Caridad, que no fueron suficientes para extinguirle ni las amenazas del más bárbaro de los tiranos, ni los más crueles e inauditos tormentos, ni las tiernas súplicas de vuestros padres, que os rogaban tuvieseis piedad de ellos y de vuestra patria accediendo a los deseos de Diocleciano, a lo que contestasteis con heroísmo santo: Mas estimo a Dios y mi virginidad, mi reino y mi patria es el cielo; interponed vuestra poderosa intercesión para con aquel Señor, que es todo Caridad y la Caridad misma por, esencia, a fin de que me dispense la gracia de que jamás mis obras se vean privadas del bálsamo saludable de esta virtud santa, para que de este modo, siempre vivas ante su divilla presencia, me proporcionen la dicha del goce eterno de su visión beatífica por los siglos de los siglos. Amén.

 

 

DIEZ DE JUNIO

ORACIÓN

¡Oh gloriosa é invicta Santa Filomena! tan tiernamente enamorada de la Cruz de Jesucristo, que animado vuestro espíritu de la fortaleza más heróica sufristeis con la mayor magnanimidad los más crueles y afrentosos tormentos, siendo arrojada con una ancora en cuello al caudaloso Tíber, de donde fuisteis sacada por ministerio de los Ángeles, y después asaeteada hasta por tres veces, no permitiendo el Señor que en la segunda vez saliesen los dardos del arco, y en la tercera haciendo que las saetas encendidas se volviesen contra los mismos verdugos, manifestando así cuán grata le era al Señor vuestra invencible fortaleza; os suplico intercedáis por mí con vuestro celestial esposo Jesucristo, a fin de que libre mi alma del naufragio horrendo de la culpa, y adornada con la estola cándida de la gracia llegue un día al puerto seguro de su salvación eterna. Amén.

 

 

DIEZ DE JULIO

ORACIÓN

¡Oh pacientísima mártir y amada esposa de Jesucristo! que en tanto grado poseísteis la virtud santa é incomparable de la Paciencia, que no fueron suficientes para apurarla ni las malévolas invenciones del más obstinado perseguidor del nombre cristiano el pérfido e inhumano Diocleciano, ni los más inauditos tormentos; suplícoos atondáis mis humildes ruegos, a fin de que por vuestra mediación consiga una vida verdaderamente cristiana, ejercitada en la virtud de la Paciencia, y conforme a la ley santa del Evangelio, no buscando en todas mis acciones sino la mayor honra y gloria de Dios y el bien espiritual de mi alma. Amén.

 DIEZ DE AGOSTO

ORACIÓN

¡Oh ínclita virgen y valerosa mártir Santa Filomena! que hallándoos encarcelada en un oscuro y profundo calabozo, cargada de cadenas y atormentada con inicuas sugestiones por el bárbaro Diocleciano, a fin de haceros desistir de vuestra más santa resolución, privada de todo auxilio humano acudisteis a vuestro celestial Esposo, y os asisteis al áncora de la verdadera esperanza María Santísima, mereciendo en premio de vuestra devoción que esta celestial estrella alumbrase vuestra lóbrega estancia, y después de consolaros os animase a padecer por su amado Hijo Jesucristo; os suplico me alcancéis del Señor una tierna y verdadera devoción hacia su santísima Madre y nuestra, María santísima, para que, ayudado de su poderosa protección y amparo, logre la dicha de la eterna bienaventuranza de la gloria. Amén.

 

 

DIEZ DE SEPTIEMBRE

ORACIÓN

Virtuosísima Santa Filomena, que predestinada por Dios para ser una de las más esforzadas heroínas del cristianismo, de tal modo cumplisteis con las obligaciones de verdadera discípula del Evangelio que trabajasteis incesantemente día y noche a fin de enriquecer vuestra preciosa alma con el tesoro inapreciable de las virtudes cristianas, llenando a conseguir ser un perfecto dechado de todas ellas; os suplico me alcancéis la gracia de un sincero arrepentimiento de mis culpas, para que, vacío mi corazón de todo afecto terreno, solo ame a Dios, que es el fin único para que fuí criado, gozándole después para siempre por toda una eternidad. Amén.

 

 

DIEZ DE OCTUBRE

ORACIÓN

¡Oh constante y esclarecida mártir Santa Filomena! Que íntimamente persuadida de que no es apto para el reino de los cielos, sino aquel que persevere hasta el fin, no os apartéis un instante del camino de la perfección evangélica, poniendo el sello a vuestras heróicas virtudes con dar vuestra vida por amor a Jesucristo, os suplico que, pues veis cuan necesaria me es la virtud santa de la perseverancia para adelantar en la vida espiritual, me alcancéis de vuestro divino esposo, a fin de que después de haber observado fiel y constantemente la ley santa y evangélica del Señor, consiga la gracia de verle y alabarle por toda una eternidad feliz y bienaventurada en el cielo. Amén.

DIEZ DE NOVIEMBRE

ORACIÓN

Victoriosa virgen y mártir Santa Filomena, que, llegando ya el feliz momento de partir de este mundo miserable, llena de la más santa alegría entregasteis vuestro inocente cuello al cuchillo del impío sicario que os dio la muerte, y adornada vuestra alma con la vestidura nupcial de la gracia subió al cielo para reinar sin fin con Jesucristo; os suplico interpongáis vuestro eficaz valimiento para con Dios, a fin de que, ayudado de los auxilios de su santa gracia, emprenda resueltamente el camino de una verdadera penitencia, y caminando por él todo el tiempo de mi vida, sea esta mortificada y virtuosa, y mi muerte preciosa en la presencia del Señor, como lo fue la vuestra. Amén.

DIEZ DE DICIEMBRE

ORACIÓN

Especialísima protectora del linaje humano Santa Filomena, que colocara en el cielo cual astro resplandeciente entre el coro de las laureadas esposas del Cordero Inmaculado, ciñe vuestras sienes la duplicada corona de Virgen y Mártir, gozando de la beatífica visión de Dios, siendo desde allí el amparo y consuelo de vuestros devotos, que no se ven defraudados en sus esperanzas, pues confirma de continuo el Señor su fé y la devoción que tan justamente os profesan, con los repetidos milagros que obra por medio de vuestra eficaz intercesión, os ruego Santa mía, atendíais a los ardientes deseos de mi corazón, e interpongáis vuestro valimiento a favor de este ínfimo devoto vuestro, a fin de que, después de haber tenido la dicha de experimentar en esta vida de los auxilios de vuestra protección eficacísima, logre la gracia de cantar las eternas alabanzas al Dios de las misericordias en vuestra compañía en la mansión eterna de la gloria, por los siglos de los siglos. Amén.