domingo, 13 de octubre de 2019

OFICIO PARVO A SAN JUAN NEPOMUCENO



OFICIO PARVO Y PRECES A SAN JUAN NEPOMUCENO
PATRONO DE LOS PENITENTES Y QUE PELIGRAN EN LA FAMA


L/: Abre mis labios divino Señor.
R/: Dirá mi boca tu santo loor

L/: Dios a mi favor y amparo atiende.
R/: Ven aprisa, Señor, ayúdame y defiende.
Gloria sea al Padre, Gloria al eterno Hijo, Gloria al Espíritu Santo, por siglos infinitos. Amen.


A MAITINES

HIMNO
Dios te salve Juan,
Compendio de gracias,
Cifra de milagros
De virtudes mapa.
Del cielo, mil favores
Tan querido alcanzas,
Que con mil loores
El mundo te exalta.
Cantad, pues, o hombres,
De Juan las dichas,
De este Santo las gracias.

L/: No apartéis, Señor, de nosotros vuestro auxilio.
R/: Ayudadme con vuestro patrocinio.

ORACIÓN: Oh Dios, a quien solo se debe la honra y gloria, humildemente os suplico por los merecimientos del glorioso Mártir San Juan Nepomuceno, que me libréis por vuestra misericordia de toda la confusión e infamia pública que por cualquier título me amenace y concededme que así, de tal manera de la honra temporal, que pueda librarme de la infamia eterna del infierno, y conseguir la inmortal gloria del cielo: por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.





A PRIMA

L/: Dios a mi favor y amparo atiende.
R/: Ven aprisa, Señor, ayúdame y defiende.

HIMNO
María Santísima.
Aurora sagrada,
Fue de nuestro Santo
La lucida casta.
Siendo estériles los padres,
Siendo la noche opaca
Salió Juan al mundo,
Como estrella del alba
Pues agradáis tanto
A la Inmaculada
Pedidla que en todo
Su favor nos valga

L/: A Vos Señor, levanto mi alma.
R/: En Vos confiado, no temo a las infamias.

ORACIÓN: Oh Dios, a quien solo se debe la honra y gloria, humildemente os suplico por los merecimientos del glorioso Mártir San Juan Nepomuceno, que me libréis por vuestra misericordia de toda la confusión e infamia pública que por cualquier título me amenace y concededme que así, de tal manera de la honra temporal, que pueda librarme de la infamia eterna del infierno, y conseguir la inmortal gloria del cielo: por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.






A TERCIA

L/: Dios a mi favor y amparo atiende.
R/: Ven aprisa, Señor, ayúdame y defiende.

HIMNO
Crecía en la edad,
Pero más abultaba
En el amor de Dios,
En que se abrazaba.
Por eso invencible,
Peligros contrasta,
Demonios desprecia,
Vicios avasalla,
Alcánzanos Mártir,
Por esta constancia,
Una caridad,
En todo abrasada.

L/: Líbrame, Señor y guarda mi alma.
R/: No quede confusa mi esperanza.

ORACIÓN: Oh Dios, a quien solo se debe la honra y gloria, humildemente os suplico por los merecimientos del glorioso Mártir San Juan Nepomuceno, que me libréis por vuestra misericordia de toda la confusión e infamia pública que por cualquier título me amenace y concededme que así, de tal manera de la honra temporal, que pueda librarme de la infamia eterna del infierno, y conseguir la inmortal gloria del cielo: por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.




A SEXTA

L/: Dios a mi favor y amparo atiende.
R/: Ven a prisa, Señor, ayúdame y defiende.

HIMNO
Cual estrella pura;
Entre sombras pardas,
A los más Teólogos;
Juan sobrepujaba,
Lirio de pureza,
Azucena blanca
Era, pero humilde
Todo disfrazaba.
Pues fuiste más puro,
Que la flor más blanca,
Dadnos odio santo

L/: Dirige, Señor, con vuestra justicia
R/: Todos cuantos pasos diere en mi vida.

ORACIÓN: Oh Dios, a quien solo se debe la honra y gloria, humildemente os suplico por los merecimientos del glorioso Mártir San Juan Nepomuceno, que me libréis por vuestra misericordia de toda la confusión e infamia pública que por cualquier título me amenace y concededme que así, de tal manera de la honra temporal, que pueda librarme de la infamia eterna del infierno, y conseguir la inmortal gloria del cielo: por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.










ENCOMIOS Y PRECES A SAN JUAN NEPOMUCENO,

Que se usan decir al Santo en toda Alemania en latín; y traducidos al Castellano, son los siguientes:


  • San Juan Nepomuceno, Amable promotor del culto Mariano,
  • Del Precursor del Señor imitador parecido,
  • Virgen a imitación de San Juan el amado Discípulo,
  • Otro nuevo San Juan Silenciario, Grande y cierto Taumaturgo de nuestro tiempo,
  • Sabedor de los celestiales arcanos, 
  • Por el Espíritu Santo superiormente instruido,
  • Señalado con la laureola de la doctrina y santidad,
  • Luz refulgente de la Metropolitana Iglesia de Praga,
  • Abogado y Asesor del Tribunal clementísimo,
  • Secretario de los arcanos del corazón humano,
  • Egregio defensor de la fama y el honor,
  • En los peligros de ignominia y confusión patrono certísimo,
  • De la lengua custodio vigilantísimo,
  • Grande destructor de la mentira y engaño,
  • De la verdad Predicador esforzado,
  • De los Predicadores espejo purísimo,
  • De los Sacerdotes ejemplar clarísimo
  • Luz clarísima de los Prelados,
  • De los Penitentes amparo segurísimo,
  • Admirable monumento del inviolable secreto de la santa Confesión;
  • En los escrúpulos y en las angustias del alma consuelo suavísimo,
  • Eximio reverenciador de la Pasión de Jesucristo,
  • Continuo en las llagas del Crucificado,
  • En los peligros repentinos director,
  • De tus encomendados patrón amantísimo, y guiador fidelísimo,
  • Esforzado guerrero por los derechos Eclesiásticos,
  • Ejemplo de sencillez de paloma, y de mansedumbre de cordero;
  • En la inocencia de vida y castidad virginal clarísimo,
  • Hacha lucidísima de los que desean la deliberación de su estado,
  • Selectísima medicina de afligidos,
  • Mas amante de la salud de las almas, que de su propia vida,
  • Varón sincerísimo de boca y corazón, 
  • Despreciador de las amenazas de un Rey terreno:
  • Tú que mereciste la gracia del Rey del cielo,
  • Tú que sacando las almas de la muerte del pecado incurriste en la muerte del cuerpo,
  • Arrojado en un rio por guardar el sigilo de la Confesión,
  • Oculto debajo de las aguas, con indicativo de estrellas fuiste manifestado del cielo:
  • Confesor y Mártir generosísimo,
  • Luciente con tantos rayos de santidad como astros,
  • Cuyas llamas de amor no pudieron apagar las muchas aguas de un rio,
  • Cuyo honor de tu sepulcro es defendido de Dios:
  • A los que te honran aumentas el honor, 
  • A los que te desprecian llenas de ignominia y confusión, 
  • Defensor y laudable conservador en los juicios ajenos;
  • En las necesidades socorredor prontísimo,
  • Santo de Dios escogido entre millares por mi Patrono;
  • Esplendor mirífico de todas mis acciones, San Juan Nepomuceno.
  • ¡O Dios! Por los méritos é intercesión de tu Siervo San Juan Nepomuceno, líbranos, Señor, de todo mal.
  • Dignaos, Señor, de propagar el culto y la veneración de S. Juan Nepomuceno, para que inclinéis vuestro oído fácilmente a todos los devotos de este Santo. Óyenos Señor.



ORACIÓN: Oh Dios, a quien solo se debe la honra y gloria, humildemente os suplico por los merecimientos del glorioso Mártir San Juan Nepomuceno, que me libréis por vuestra misericordia de toda confusión e infamia pública que por cualquier título me amenace; y concededme que use de tal modo de la honra temporal, que pueda librarme de la infamia eterna del infierno, y conseguir la inmortal gloria del cielo: por los méritos de Jesucristo Nuestro Señor. Amen.






OFICIO PARVO DEL SANTÍSIMO SACRAMENTO

OFFÍCIUM PARVUM SANCTÍSSIMUM SACRAMÉNTUM ALTÁRIS


Oficio Parvo del Santísimo Sacramento del Altar

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EXPLICACIÓN
de lo que son los Oficios Parvos
por Gil Fiallos.


Un oficio parvo, como su nombre lo indica, es una reducción del Oficio Divino. Es una devoción que imita a la liturgia y se basa en ésta. Los devotos de cierto misterio o santo lo pueden conmemorar así después del rezo de la respectiva hora del Oficio Divino. Si no tienen la obligación de rezar todo el Oficio y tampoco tienen esta devoción, un Oficio Parvo sigue siendo una devoción muy provechosa que imita el ritmo de la Liturgia. Todas las horas comienzan con unos versículos y responsorios. A las horas de Maitines y Completas se les añaden uno propio. El Oficio Parvo carece de la hora Laudes ya que la tradición para el canto del Oficio es que Maitines y Laudes se canten juntos como una sola hora. Hasta que es concluido el rezo de estas horas hay tiempo para rezar la hora del Oficio Parvo. El tiempo para el canto de cada hora del Oficio Parvo va de la mano con las horas del Oficio Divino. Prima es a las 6 de la mañana, Tercia a las 9, Sexta al mediodía, Nona a las 3 de la tarde, Vísperas alrededor de la puesta del sol y Completas antes de dormir. Maitines puede ser adelantado a la noche o tarde anterior. Vísperas se pueden adelantar hasta las 2 de la tarde y en Cuaresma antiguamente había costumbre de rezarlas al mediodía. Cada hora concluye con una Antífona, un versículo y responsorio y una colecta. Después de Completa se hace una encomendación del alma.



Oficio Parvo del Santísimo Sacramento del Altar

ORDINARIA


Ad Horas Omnes
℣. Panem Angelórum manducávit homo, et parátur ei mensa Dómini. 
℞. Amen.


En todas las horas
℣. Pan de Ángeles comió el hombre, y el Señor les preparó su mesa. 
℞. Amen.


Ad Matutinum
℣. Domine labia mea aperies. 
℞. Et os meum annuntiabit laudem tuam.


Maitines
℣. Señor abre mis labios
℞. Y mi boca anunciará tus alabanzas


Ad Completorium
℣. Converte nos, Deus salutaris noster. 
℞. Et averte iram tuam a nobis.


Completas
℣. Conviertenos, oh Dios nuestro salvador.
℞. Y aleja tu ira de nosotros.


Ad Horas Omnes
℣. Deus in adiutorium meum intende. 
℞. Domine ad adiuvandum me festina.
℣. Gloria Patri, et Filio, et Spiritui Sancto.  
℞. Sicut erat in principio, et nunc, et semper, et in saecula saeculorum. Alleluia*.
*A Septuagesima usque ad Pascha, loco Alleluia, dicitur
Laus tibi, Domine, Rex aeternae gloriae.


En todas las horas
℣. O Dios ven en mi auxilio.
℞. Señor, date prisa en socorrerme.
℣. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
℞. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.
*Desde Septuagésima hasta Pascua, en vez de Aleluya se dice
Alabanza a ti, Señor, rey de la gloria eterna.


AD MATUTÍNUM
Pange, lingua, gloriósi
Córporis mystérium
Sanguinísque pretiósi,
Quem in mundi prétium
Fructus ventris generósi
Rex effúdit géntium.


MAITINES
Canta, lengua mía, el misterio
del Cuerpo glorioso 
y de la Sangre preciosa,
que el Rey de las naciones, 
hijo de una Madre fecunda, 
derramó por rescatar al mundo. 
          
AD PRIMAM  
Nobis datus, nobis natus
Ex intácta Vírgine,
Et in mundo conversátus,
Sparso verbi sémine,
Sui moras incolátus
Miro clausit órdine.


PRIMA
A nosotros se dio y para nosotros nació 
de una Virgen sin mancilla;
 y después de haber vivido en el mundo 
desparramando la simiente de la divina palabra, 
terminó las tardanzas de su destierro 
por una admirable institución.
     
AD TERTIAM  
In suprémæ nocte cœnæ
Recúmbens cum frátribus,
Observáta lege plene
Cibis in legálibus,
Cibum turbæ duodénæ
Se dat súis mánibus.


TERCIA
En la noche de la última Cena, 
sentado a la mesa con los Hermanos, 
después de observar todo lo prescrito por la Ley 
acerca del convite legal, 
dióse a Sí mismo con sus propias manos 
en alimento a los doce que se había escogido.
     
AD SEXTAM  
Verbum caro, panem verum
Verbo carnem éfficit,
Fitque Sanguis Christi merum,
Et, si sensus déficit,
Ad firmándum cor sincérum
Sola fides súfficit.


SEXTA
El Verbo hecho carne, por su palabra 
hace de su Carne verdadero pan, 
y el vino se convierte en Sangre de Cristo; 
y si los sentidos no lo perciben, 
la fe basta para corroborar 
de ello al corazón puro.


AD NONAM
Panis Angélicus 
Fit panis hóminum;
Dat panis cœ́licus
Figúris términum:
O res mirábilis!
Mandúcat Dóminum
Pauper, servus, et húmilis.


NONA
El Pan de Ángeles 
es hecho Pan de hombres: 
da el Pan celestial fin 
a todas las antiguas figuras. 
¡Oh cosa admirable! 
¡qué coma al Señor el pobre, 
el siervo y el humilde!


AD VÉSPERAS  
Tantum ergo Sacraméntum,
Venerémur cérnui:
Et antíquum documéntum
Novo cedat rítui;
Præstet fides suppleméntum
Sénsuum deféctui.


VÍSPERAS
Adoremos de hinojos 
este gran sacramento; 
que el Antiguo Testamento 
ceda el lugar al nuevo Rito: 
que la fe supla la flaqueza 
de nuestros sentidos.


AD COMPLETÓRIUM   
Genitóri Genitóque,
Laus et jubilátio;
Salus, honor, virtus quoque,
Sit et benedíctio;
Procedénti ab utróque
Compar sit laudátio.


COMPLETAS
Alabanzas, cantos de júbilo,
 salud, honor, poder 
y acción de gracias 
al Padre y al Hijo; 
e igual homenaje al Espíritu Santo, 
que de entrambos procede.
    
CONCLUSIO


Ant. O quam suávis est, Dómine, spíritus tuus, qui ut dulcédinem tuam in fílios demonstráres, pane suavíssimo de Cœlo præstíto esuriéntes reples bonis, fastidiósos dívites dimíttens inánes.


℣. Panem de Cœlo præstitísti eis.
℞. Omne delectaméntum in se habéntem.
     
Orémus:
Deus, qui nobis sub Sacraménto mirábili passiónis tuæ memóriam reliquísti: tríbue, quǽsumus, ita nos Córporis et Sánguinis tui sacra mystéria venerári; ut redemptiónis tuæ fructum in nobis júgiter sentiámus: Qui vivis et regnas cum Deo Patre, in unitáte Spíritus Sancti Deus, per ómnia sǽcula sæculórum. Amen.


CONCLUSIÓN 
Ant. ¡Oh cuán suave es, Señor, tu Espíritu! pues queriendo demostrar a tus hijos tu ternura, por medio del Pan suavísimo dado por el cielo, hinches de bienes a los que de él tienen hambre, dejando vacíos a los ricos que hacen ascos de tu mesa.


℣.  Les diste, Señor, el pan del cielo.
℞. Que en sí contiene todas las delicias.


Oremos:
Oh Dios, que bajo la forma de un Sacramento admirable, nos dejaste el memorial de tu Pasión; pedimoste, Señor, nos concedas celebrar de tal manera los misterios de tu Cuerpo y Sangre, que experimentemos constantemente en nosotros el fruto de tu Redención. Que vives y reinas con Dios Padre en la unidad del Espíritu Santo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
    
Commendátio 
Has horas canónicas cum devotióne,
Dixi in memóriam tui, Jesu bone,
Córpori sanctíssimi, pia ratióne
Fac ut illo pérfruar Cœli regióne.
Amen.


Encomienda del alma, después de las Completas
Estas horas canónicas con devoción,
he dicho en tu memoria, oh buen Jesús, 
haz piadoso, por tu Santísimo Cuerpo
que goce de él en la región celestial.
Amén.



ANOTACIONES

Al hablar sobre la piedad popular, es referirnos a aquellas devociones que antaño se hacían en nuestros pueblos y nuestras casas, cuando se...