martes, 7 de abril de 2020

DIA CUATRO DE MES A SAN FRANCISCO DE ASÍS





VISITA MENSUAL AL SERÁFICO PADRE SAN FRANCISCO DE ASÍS PARA EL CUATRO DE CADA MES

 Por: Miguel Morales

ORACIÓN
Padre ¡Padre mío San Francisco! Heme aquí a tus pies, pobrecillo pecador, pero hijo tuyo amantísimo. Vengo a cumplir un deber filial, visitándote, mírame como los padres miran a sus hijos, mírame con esa mirada de ternura con que mirabas durante tu vida mortal a los pobres, a los humildes, a los que luchamos en esta vida, a los que somos víctimas de dolor… ¡Mírame Padre mío! Y que tu mirada infunda en mi alma sentimientos e pureza, amor al sacrificio, sosiego de espíritu y sobre todo, aquel amor de caridad que inflamó tu pecho, encendió tus llagas y te hizo émulo de los serafines… mírame que tu hijo soy, y tanto más necesitado de tu paternal cariño, cuanto más miserable. Mírame ¡Oh dulce Padre mío! Y que tus ojos no se aparten de mi en la vida, en la hora de la muerte y en el cielo. Amén.

 ANTÍFONA: Perfeccionad Padre, la viña que vuestras manos han plantado y escuchad las suplicas de vuestros hijos. Así sea.

MEDITACIÓN
El seráfico Padre San Francisco, en el cielo ocupa el lugar que el más alto serafín, Lucifer, perdió por su soberbia. La intercesión de nuestro santo es poderosísima, cuando solicita un favor extraordinario, representa a Jesús las llagas que recibió en su cuerpo, a cuya vista lo tiene como asociado a la grande obra de la salvación del mundo. La gloria del Serafín de Asís quedará perpetuada hasta el fin del mundo, porque la triple orden, de Frailes Menores, Religiosas Clarisas y Hermanos Terciarios, que llevan la promesa de durar por siempre sobre la tierra, tiene el encargo de publicarla, conservarla y aumentarla. En una palabra, fue amada de Dios que le adornó de copiosísimas gracias, el predilecto del Sagrado Corazón, que con la impresión de las Llagas le hizo el mortal más igual a sí, y el distinguido de la Virgen Madre, que le favoreció con singulares favores, por haber procurado siempre su mayor gloria.

SÚPLICA
Glorioso Padre San Francisco, os escogemos por nuestro especial patrono, y nos colocamos bajo vuestra protección, aceptadnos como devotos e hijos vuestros. Pedid al Señor que nos asista con su gracia, obtenednos las virtudes que necesitamos para hacernos dignos de vos. Haced que amemos sobre todas las cosas a Dios y a la Virgen María, que venzamos todas las malas inclinaciones y nos conformemos a la Voluntad de Dios. Para más obligaros os saludamos con lo siguiente:

DEPRECACIONES
¡Oh glorioso Padre San Francisco! Que comunicasteis vuestro espíritu de pobreza, abnegación y celo apostólico a los religiosos de la Primera Orden, suplicad al Señor se digne concedernos la pobreza de espíritu y celo de la gloria Divina.

¡Amable Padre mío San Francisco! Que comunicasteis vuestro espíritu de pobreza, oración y sacrificio a las religiosas de la Segunda Oración, alcanzadnos del Señor las gracias necesarias para sacrificar nuestros gustos y pasiones, y para entregarnos a la oración y al cumplimiento de la divina voluntad.
Padre nuestro, Ave María y Gloria.

¡Seráfico Padre San Francisco! Que comunicasteis vuestro espíritu de pobreza, de penitencia y menosprecio del mundo a los individuos de vuestra Tercera Orden, obtenednos del Señor que, conociendo y arrepintiéndonos de nuestros pecados, podamos satisfacer por ellos con nuestra mortificación y penitencia.
Padre nuestro, Ave María y Gloria.


L/: Rogad por nosotros, Padre nuestro San Francisco.
R/: Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Cristo

ORACIÓN:  Oh Dios, que, multiplicando los hijos del Padre San Francisco, dais un nuevo lustre a vuestra Iglesia, hacednos la gracia, de que, a ejemplo suyo, despreciemos las grandezas y bienes de este mundo, y alcancemos las del cielo. Por Jesucristo nuestro Señor. Así sea.


AL SANTO PADRE
Desde la altísima gloria
A que te hayas elevado,
A todo género humano
Vivamos en tu memoria,
Mira, serafín llagado,
A los que fiados ponemos
Nuestra suerte en tus manos,
Intercede por nosotros
Francisco, para que seamos
Partícipes de la gloria,
Siendo bienaventurados.

Aquí se hace la petición y luego se rezan las siguientes:


Santísimo Francisco R/: Ruega por nosotros
Profeta excelentísimo
Apóstol de la Iglesia
Viva imagen de Cristo
Mártir purísimo de amor
Antorcha lucidísima de resplandores divinos
Clarín del Evangelio
Pregonero del gran Rey
Padre de los menores
Amado de la Reina de los Ángeles
Virgen purísimo
Patriarca de los pobres
Modelo de obediencia
Ejemplar de penitentes
Lucero brillante
Varón crucificado que llevaste en tu cuerpo las llagas
Sednos propicio R/: Alcánzanos el perdón
Sednos propicio R/: Oye nuestros ruegos
De todo mal R/: Líbranos Francisco
De todo pecado
De la muerte eterna
De la ira del Señor
De las acechanzas del demonio
En el día de la tribulación R/: te rogamos nos oigas
Dígnate conducirnos a una verdadera penitencia
Por tu admirable humildad
Por tu pureza de espíritu
Por la admirable dignación con que Cristo te honró concediéndote la indulgencia de la Porciúncula
Por haber impreso en tu Santísimo Cuerpo las insignias de nuestra redención
Por la excelsa gloria con que ha premiado en el cielo tus virtudes
Óyenos Padre Santísimo.
Escúchanos Francisco poderosísimo.

Aquí se rezan cinco padres nuestros, aves maría y glorias a las llagas del Santo Padre, y luego se dice lo siguiente:

SALMO
Ven en nuestra ayuda Santísimo Padre Francisco, y no tardes en socorrerme.
Sean confundidos y avergonzados con tu poder los enemigos de la Santa Iglesia.
Mira a tu heredad con ojos piadosos, y protégela amorosamente desde el cielo.
Pobres y necesitados clamamos por tu ayuda, socorrednos, Padre amoroso amantísimo.
Y pues eres nuestro protector y libertador, mira por nuestra causa.

Gloria al Padre, y al Hijo
Y al Espíritu Sagrado,
En honor y bendición
A este Serafín llagado.

L/: Salva a tus Hijos
R/: Que en ti esperan

L/: Sednos torre de Fortaleza.
R/: Contra nuestros enemigos.

L/: Santísimo Padre, no te portes con nosotros, según lo merecen nuestros pecados.
R/: Ten piedad de nosotros, porque eres imagen del Dios de las misericordias.

L/: Visita y perfecciona esta viña.
R/: Pues la plantó tu diestra.

L/: Escucha nuestros ruegos Padre amorosísimo.
R/: Y no desprecies nuestros clamores.

ORACIÓN: Suplicámoste Santísimo Padre Francisco, des oídos a nuestras humildes súplicas, para que los que invocamos tu patrocinio, sintamos los efectos de tu piedad.

Serafín llagado, Padre amorosísimo, si te han agraviado nuestras culpas y el haber con nuestras transgresiones a tus preceptos degenerado el carácter de hijos tuyos, muévete a piedad nuestra misma miseria y los suspiros penitentes con que pedimos el perdón de nuestra ingratitud. Presenta esas llagas preciosas al Eterno, para que por tu intercesión mire con misericordia a tu afligida grey. Ruega poderoso Francisco, pide por nosotros que vivimos oprimidos de tantos males, alcánzanos la gracia y clemencia del Señor, para que, triunfando de todos nuestros enemigos, bendigamos a Dios, porque te crió tan admirable. Esto te lo pedimos por esos signos preciosos con que te marcó Jesús, y por la gloria que posees en el cielo, a donde vives y reinas por toda la eternidad. Amén.



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