VISITA A NUESTRA SEÑORA DE LA SOLEDAD
EN SU SANTUARIO
(En las ciudades de México y Oaxaca)
ORACIÓN
Adorada Reina y dulce Madre mía, aquí me tienes postrado a tus pies contemplando tu triste soledad. Vengo a aprender de Ti, a llorar y sentir la muerte de tu amado Hijo y mi Señor: no quites de mí, tus llorosos ojos, tierna Madre, que, aunque yo con el pecado tantas veces he puesto las manos en tu inocente Abel, vengo ya a tu presencia confesando mi cruel ingratitud y terrible maldad. Murió a mis manos tu Jesús querido cuando pequé, dolorosa Madre mía, aquí está el instrumento del sangriento deicidio, que es mi voluntad perversa, Yo he redoblado sus martirios, multiplicado sus llagas, derramado su sangre y herido su corazón. Cuanto me pesa ya, Señora mía, sobre todo al levantar mis miradas hacia esa imagen hermosísima que tan bien retrata tu amarga Soledad. Concédeme madre tiernísima de mi corazón, un vivo dolor de mis culpas y el remedio de mis necesidades por la amargura y desolación que sentiste al ver muerto a tu Jesús, sin persona que lo bajase del madero, por carecer de lienzo en que envolver su sacratísimo cuerpo y un sepulcro en que depositarlo y sobre todo por la soledad en que quedaste. Remedia, sobre todo, mi gran necesidad; la del peligro en que se halla mi alma de perderse para siempre, a fin de que, así como ahora te hago compañía en tu soledad vaya a hacértela después en el cielo.
Se
rezan tres Salves en honor de las tres necesidades y siete Ave Marías a sus
dolores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario