NOVENA A SAN JUDAS TADEO

NOVENA AL GLORIOSO SAN JUDAS TADEO

COMPUESTA

POR DON ALONSO DE HUESCA

Presbítero

1843

ORACION PARA TODOS LOS DIAS

Sagrado y milagrosísimo Apóstol San Judas Tadeo, obrero infatigable de la Viña del Señor y su Santa Iglesia, solicito propagador del santo Evangelio en todo el universo, envuelto en las más densas tinieblas del gentilismo; si conduce al mayor honor de Dios, y a la mayor gloria de vuestra grandeza, el que yo consiga lo que necesito, deseo y pido en esta vuestra Novena, recabadme esta merced y gracia del Señor, a quien tenéis tan obligado con vuestra vida y muerte Santísima, y si no me conviene lo que yo os suplico, trocad mis ruegos, y pedid para mi á Dios aquel favor que más me convenga, para gloria suya, y utilidad de mi alma. Amen.

DIA PRIMERO

ORACIÓN

Dios y Señor de todos los espíritus angélicos, que repartidos en nueve Coros os sirven en el cielo, empleados siempre en vuestras alabanzas y en vuestro amor, y por lo mismo atienden continuamente al socorro y consuelo de los hombres en el mundo. Yo os ofrezco los merecimientos dc estos nobilísimos Espíritus, ministros de vuestra gloria y especialmente los del Príncipe de todos ellos S. Miguel, y los de vuestro fiel siervo y grande Apóstol San Judas Tadeo, ministro infatigable de vuestras empresas, quien, teniéndoos siempre presente en su memoria, os alababa continuamente, y por vuestro amor atendió al alivio y consuelo de todos los necesitados. Yo os pido que me deis gracia para emplearme en las mismas buenas obras, yen vuestras alabanzas, acordándome de Vos solo, y amándoos como al sumo Bien de mi alma; y la gracia que os pido en esta Novena, si es para mayor gloria vuestra y bien de mi alma. Amen.

SALVE

Salve felicísimo San Judas Tadeo, yo os saludo benigno y adoro en tu nombre a la Santísima Trinidad porque te dio el ser y te estrechó por los vínculos de sangre, con Jesús, María y José. Padrenuestro, Avemaría y Gloria.

Salve felicísimo San Judas Tadeo, yo os saludo benigno y adoro en tu nombre a la Santísima Trinidad porque te escogió para Apóstol de Jesucristo y testigo de divinidad. Padrenuestro, Avemaría y Gloria.

Salve felicísimo San Judas Tadeo, yo os saludo benigno y adoro en tu nombre a la Santísima Trinidad porque te concedió la dichosa Palma del Martirio y el descanso eterno en la gloria. Padrenuestro, Avemaría y Gloria.

ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS

Piadosísimo Apóstol San Judas, que del trato familiar y continuo que mereció vuestra dicha de tener con el Niño Jesús y con la santísima Reyna María, a título de muy cercano pariente de uno y otro, mirando tan divinos astros desde su oriente, se inflamaba vuestra voluntad a quererlos, servirlos y respetarlos, con los mismos soberanos influjos que arrojaban a vuestra alma purísima; por los méritos infinitos del mismo Jesús, y por las virtudes singularísimas, y privilegios de la misma Madre de Dios y Señora nuestra, concebida en gracia, os pido con todo el afecto de mi corazón, que en todas mis acciones, palabras y pensamientos no pierda yo de vista jamás a mi Redentor Jesús, y a su Madre y mía, nuestra Señora, sino que regule, y gobierne mis operaciones todas por nortes tan divinos, para que llegada la hora de mi muerte, ni me perturben los pensamientos vanos del mundo, ni me congojen las acciones desordenadas de mi vida, sino que se hallen todos mis sentidos, y mis potencias en una serena tranquilidad de conciencia para que empleada mi voluntad en fervorosos actos de amor de Dios, y en una resignación total en su santísima voluntad, diligentísimamente busque, y perfectamente consiga, aquel uno necesario, que es morir y descansar en paz en el patrocinio de María santísima, en las preciosísimas Llagas de Jesucristo su preciosísimo Hijo, en la estrechísima unión de mi Dios y mi Señor, y en vuestro acatamiento divino, por cuyos ruegos confío conseguir esta gracia. Mas en tanto que la Majestad divina quisiera conservar mi vida, os suplico santísimo Apóstol, y poderoso protector mío, me consigáis de la bondad infinita de Dios, que viva yo siempre como quien ha de morir, y viva la vida de los justos, para que muera con la muerte de los Santos, imitando vuestras heroicas virtudes, y cumpliendo con toda perfección su santísima voluntad, para que mi muerte siendo feliz, sea tránsito dichoso a la vida eterna, y al mismo tiempo os ruego me alcanceis lo que pido en esta Novena, si es para mayor gloria de Dios y bien de mi alma. Amen.

GOZOS AL BIENAVENTURADO SAN JUDAS TADEO

Pues sois, Apóstol sagrado,

norte fijo a nuestros votos,

Haced que vuestros devotos,

salgan todos de pecado.

Caná fue quien te dió suelo,

mas con tu hermano Símon,

llevaís de la Fe el timón,

como pilotos del cielo;

pues debéis tal desvelo

al que os llamó con cuidado:

Hízote el Autor del día,

de sangre tan elevada,

que tu estirpe real sagrada

es la de Cristo y María;

y pues nos causa alegría

ver tu ser tan encumbrado,

Una plática de amor

os hizo Vuestro Maestro,

en que os mostró sabio y diestro,

de la virtud el primor;

oyendo nuestro clamor,

ó Judas, de Dios amado!

En Persia reconocieron

los ídolos infernales

tus palabras celestiales,

pues todos enmudecieron;

y pues respuesta no dieron,

sí una sola, a tu mandado:

Los idólatras vencidos

de oír tu predicación,

rindieron adoración

al Señor reconocidos;

pues de su error convencidos

te admiran divinizado:

Unos magos insolentes,

con diabólica presteza, -

contra la Fe y su pureza,

se valen de unas serpientes;

ya que a tu voz obedientes

vengan hecho tan malvado:

Concibió de una impureza

una principal liviana,

dando la culpa tirana

de un Levita la pureza;

pues el niño con destreza

hacéis disculpe al culpado:

Preso en un templo te viste,

con cadenas amarrado,

más al ídolo malvado

tendido a tus pies pusiste;

pues. tanto valor tuviste

en lance tan apretado:

En fin, con rigor tirano

á manos de unos gentiles,

con puntas de garfios viles

pausó el valor más que humano;

pues lo quiso el Soberano,

sacro Autor de lo criado:

Mas viendo Dios tus desmayos,

contra tan bárbaros canes

aprestando sus volcanes

disparó granizo y rayos,

pues de tan\bravos vasallos,

quiso Dios verte vengado

Son tus maravillas tales,

que haberlas de referir,

fuera fuerza recurrir

á unas lenguas celestiales;

y aun estas por sus cabales

no te dejaran copiado:

A quien te tiene en memoria,

ó Judas esclarecido!

pues eres de Dios valido,

has que consiga la gloria;

y en la vida transitoria

de bienes quede colmado;

Haced que vuestros devotos

salgan todos de pecado.

L/: Ruega por nosotros Bienaventurado Judas

R/: Para que seamos dignos de las promesas de Cristo

ORACIÓN

Todopoderoso y sempiterno Dios y Criador de todas las cosas, acordaos que vos solo hicisteis a vuestra imagen y semejanza las animas de los infieles; y pues sabéis que el Universo todo, donde me enviáis a predicar vuestra santa Ley y vuestro Evangelio, está lleno de gentiles, de paganos y de idólatras, que en vez de serviros os ofenden, y en lugar de seguir vuestra sacrosanta Ley, siguen con ceguedad obstinada las falsas y diabólicas sectas que los condenan, mirad, Señor, y Dios nuestro, cómo en desgracia suya se llenan de ellos los infiernos; acordaos, Señor, de vuestro Hijo único Jesucristo, que derramando con infinito amor todo el raudal de su preciosísima Sangre, padeció por ellos afrentosa muerte de cruz. No permitáis que vuestro Hijo amantísimo y Señor nuestro sea por más tiempo desconocido y menospreciado de los gentiles; antes bien, aplacada vuestra justa ira con los ruegos de vuestros escogidos los Santos del cielo, con las súplicas de los justos de la tierra, y con las oraciones de la Iglesia, Esposa queridísima de vuestro mismo Hijo, acordaos de vuestra misericordia infinitamente mayor que su ingratitud; y olvidando su idolatría e infidelidad, haced que ellos conozcan también, como vuestros escogidos los fieles, a Jesucristo vuestro Hijo y Señor nuestro, a quien enviasteis al mundo para su dicha y nuestra; para que siendo como es la salud, la vida y resurrección nuestra, seamos todos libros por él, y consigamos salvarnos; a quien sea gloria por infinitos siglos de los siglos. Amen.

DIA SEGUNDO

ORACION

Dios y Señor de los Patriarcas, celadores vigilantísimo de vuestra honra, y de vuestra santísima Ley, conservando y aumentando su perfecta observancia con sus consejos y sus ejemplos, como padres de vuestro pueblo escogido; yo os ofrezco los merecimientos de estos fidelísimos siervos vuestros, y los de vuestro Apóstol S. Judas, tan celoso de vuestra honra y de vuestra Ley, que a costa de infinitos afanes y trabajos, conservó en los que la profesaban, y extendió en los que no la conocían la observancia de ella, y os pido que me concedáis el que yo la observe perfectamente, y procure en cuanto esté de mi parte, que la observen otros, para que todos os sirvan y os amen todos, hasta llegar a gozaros en la vida eterna y la gracia que os pido en esta Novena, a mayor gloria vuestra y bien de mi alma. Amen.

DIA TERCERO

ORACION

Dios y Señor de los Profetas, predicadores de vuestro poder y de vuestra misericordia, que anunciaban y prevenían a los hombres vuestros castigos para la enmienda de sus vidas y de sus costumbres, y prometían la redención y la libertad del mundo del cautiverio del demonio, para su alivio y verdadera alegría: yo os ofrezco los merecimientos de estos santísimos Predicadores de vuestra Ley, y los de vuestro grande Apóstol y Predicador evangélico San Judas Tadeo, que anunciando lo futuro, y previniendo lo que había de suceder, avisaba y exhortaba á todos a elegir los medios más seguros para salvarse, y apartarse de los peligros y riesgos de perderse, y os pido que me concedáis gracia para prevenirme para una buena muerte, por el seguro medio de una buena vida, apartándome de los peligros y engaños del mundo, y la gracia que os pido en esta Novena, si es para gloria vuestra y bien de mi alma. Amen.

DIA CUARTO

ORACION

Dios y Señor de los Apóstoles, a quienes elegisteis y enviasteis por todo el mundo para que le convirtiesen y redujesen a vuestra santísima Ley, predicando el Evangelio a todas las gentes, y dándoles a conocer vuestro santo Nombre, para que dejando el culto que daban al demonio en la adoración a los ídolos, de sus falsos dioses os sirviesen á vos solo y único Dios verdadero; yo os ofrezco los merecimientos de es tos incansables Obreros vuestros, y en ellos los de vuestro grande Apóstol San Judas Tadeo, que llevando vuestro Nombre a tantas naciones, convirtió y alumbró tantas gentes ciegas, derribando los ídolos de sus templos, desterrando al demonio de sus corazones, y haciendo que reinase en ellos vos solo. Y os pido, que me concedáis el que yo derribe de mi corazón los falsos ídolos que han fabricado dentro de él mis vanos deseos, y lo conserve limpio y puro para templo y morada vuestra: y la gracia que os pido en esta Novena, si es para mayor gloria vuestra y bien de mi alma. Amen.

DIA QUINTO

ORACION

Dios y Señor de los Mártires esforzados defensores de la Fe y Religión verdadera, a costa de su propia sangre y vida, padeciendo tantos géneros de tormentos por no perderos ni negar vuestro Nombre. Yo os ofrezco los merecimientos de estos valentísimos soldados de la Militante Iglesia, y los de vuestro grande Apóstol San Judas Tadeo, que peleó constante hasta derramar su sangre y perder su vida en defensa de la Ley verdadera, confesando vuestro Nombre a pesar de los infieles que le despreciaban, y os pido que me deis constancia, para perseverar en vuestra santísima Ley, y valor para no faltar a ella hasta perder la vida por no ofenderos: y la gracia que os pido en esta Novena, si es para gloria vuestra y bien de mi alma, Amen.

DIA SEXTO

ORACION

Dios y Señor de los Doctores antorchas lucidísimas, que, puestas sobre el candelero de la Iglesia, explicando y enseñando la Doctrina más verdadera, alumbraron é ilustraron los entendimientos, é inflamaron las voluntades en el amor, y aprecio de las virtudes. Yo os ofrezco los merecimientos de estos Sapientísimos Maestros, y los de vuestro Apóstol San Judas Tadeo, que como luz clarísima alumbró los entendimientos obscurecidos con las tinieblas de la ignorancia y de la idolatría, enseñando a todos lo que debían saber para vivir bien y salvarse; y os pido que me concedáis la luz de que necesita mi alma para que yo acierte a cumplir con las obligaciones que me impone mi profesión y mi estado; y la gracia que os pido en esta Novena, si es para gloria vuestra y bien de mi alma. Amen.

DIA SÉPTIMO

ORACION

Dios y Señor de los Pontífices, Pastores celosísimos del rebaño de Jesucristo vuestro Santísimo Hijo, que, guardándole de los sangrientos lobos infernales, y dándole el pasto saludable de las almas le guiaron por el seguro camino que lleva a la eterna bienaventuranza; yo os ofrezco los merecimientos de estos vigilantes defensores nuestros, y los de vuestro siervo y grande Apóstol San Judas Tadeo, padre y pastor amantísimo de las almas, y defensor seguro de todos sus devotos y encomendados, obrando estupendos prodigios para remedio y amparo suyo, librándolos de los riesgos, y sanándolos de sus enfermedades; y os suplico que me concedáis por su intercesión, el que yo viva de modo que no pueda hacer presa en mí el común enemigo, y me libréis del pecado, que es la enfermedad mortal de mi alma, y la gracia que os pido en esta Novena, si es para gloria vuestra y bien de mi alma. Amen.

DIA OCTAVO

ORACION

Dios, y Señor de los Confesores, Espejos clarísimos de la perfección cristiana, y ejemplares seguros de todas las virtudes, que se ejercitaron en todas las obras de caridad, con Dios y con sus prójimos. Yo os ofrezco los merecimientos de estos perfectísimos amadores vuestros, y los de vuestro Apóstol San Judas Tadeo, que ejecutó tantas heróicas obras, y en quien resplandecieron, tantas virtudes para honra vuestra y provecho del prójimo; y os pido que me concedáis la caridad con mis hermanos, y el amor aun de mis enemigos, perdonando por vos las injurias que me hicieren los malos, é imitando los buenos ejemplos que me dieren los buenos, para que yo consiga los premios que tenéis ofrecidos a los que os obedecen y os sirven; y la gracia que os pido en esta Novena, si es para gloria vuestra y bien de mi alma. Amen.

DIA NOVENO

ORACION

Dios y Señor de las Vírgenes, flores hermosísimas del ameno jardín de la Iglesia, que se conservaron intactas, y puras, entre las espinas de las tentaciones con el riego de la mortificación y de la penitencia, y el celestial rocío de la contemplación de vuestras perfecciones. Yo os ofrezco los merecimientos de estas castísimas esposas vuestras, y los de vuestro Apóstol San Judas Tadeo, que jurado enemigo de su cuerpo, conservó su alma ante vuestra presencia limpia de la menor mancha de impureza; y os pido que me concedáis el que yo desprecia los blandos halagos de la carne, y me abrase con la Cruz de vuestro santísimo Hijo, refrenando mis apetitos y pasiones con la memoria de su Pasión y de sus tormentos, para poder subir al monte de vuestra gloria donde no suben sino los limpios de corazón, y de alma inmaculada y la gracia que os pido en esta Novena, si es para gloria vuestra y bien de mi alma. Amen.