NOVENA A MARÍA SANTÍSIMA DE GUADALUPE
ESPECIAL ABOGADA CONTRA LA PESTE
Por el Br. Don Manuel Antonio Alonso
Martínez,
CON LICENCIA
Año de 1806
Puesto de rodillas delante de una Imagen de nuestra Señora, habiéndote persignado harás el siguiente:
ACTO DE
Dios te salve María Santísima de Guadalupe, amantísima Madre de pecadores, a mí me pesa, Señora, de haber ofendido a tu Hijo, y mi Dios, por ser quien es, y por ser Hijo tuyo; y por qué le amo sobre todo amor, y por ser ofensas contra Ti (a quien después de su Majestad debía amar) espero, Madre mía, por tu intercesión, alcanzar perdón de mis pecados, y gracia para nunca más pecar, y prometo, Señora, la enmienda de vida, y cumplir hasta la muerte este propósito, y no me desampares; ruega a Jesús tenga misericordia de mí. Pequé, Señora roía, alcánzame misericordia de tu Hijo Jesús. Amén.
ORACIÓN
Dios te salve María, Madre de Misericordia, Aurora y Precursora de la gracia, Pronostico de la salud del mundo, Cristo Jesús. Rey de los Ángeles y hombres, Iris que convierte los rigores de un Dios airado, en dulces misericordias; alegría del Cielo y tierra, felicidad de este Reyno Indiano; por tu Nombre y Sagrada Aparición de Guadalupe, te pedimos estampes en nuestras almas con el pincel de tu gracia la Imagen de tu hermosísimo Rostro, dándome la Joya apreciable de la caridad perfecta para con Dios y nuestros prójimos, una muerte de puro amor de Dios, y dolor de nuestros pecados: en ella tu asistencia para alcanzar perdón y en vida amor a nuestros enemigos, resolución de no pecar más inclinación a las virtudes, y aprecio a la frecuencia de Sacramentos, para vivir en gracia, y gozar de la alegría perfecta, que es gozar de Dios en tu compañía, amándolo en su Gloria. Amén.
PRIMER
Dios
te salve María, Gloria de la Trinidad Beatísima, Paraíso de sus delicias. Dios te
salve gloria y Reyna de los Ángeles: yo te alabo con estos hermosísimos Espíritus,
y por sus medros te ruego, que con su custodia hagas que no nos apartemos de sus
consejos, y que nuestra gloria sea observarlos cumpliendo los Mandamientos de
Dios para ser fíeles Siervos, y entrar en el gozo de la Gloria. Amén.
Tabernáculo
de Dios es María, colocado en medio de su Ciudad, y no será conmovido.
L/:
Virgen de Guadalupe.
R/: Ruega por nosotros.
Tú
has salido para la salud de tu pueblo; para su salud has salido con Jesucristo
tu Hijo.
Ave María.
L/: Virgen de Guadalupe.
R/: Ruega por nosotros
Gloriosas
cosas de ti han sido dichas, oh Ciudad de Dios: el Señor te ha fundado sobre
las santas montañas.
L/:
Virgen de Guadalupe.
R/: Ruega por nosotros
Una
gran señal apareció en el cielo: era una mujer cubierta por el sol, y la luna
debajo de sus pies.
Ave María.
L/: Virgen de Guadalupe.
R/: Ruega por nosotros
El
pueblo que caminaba en tinieblas, vió una gran luz; para los que habitaban en
la región de la sombra de la muerte, la luz les ha nacido.
Ave María.
L/: Virgen de Guadalupe.
R/: Ruega por nosotros
L/: Madre mía, a ti de lejos vendrán tus
hijos.
R/: de tu lado se alzarán
tus hijas.
ORACIÓN: Oh
Dios, que, habiéndonos colocado bajo el patrocinio singular de la beatísima Virgen
María, nos has querido colmar de continuos beneficios, concede a los que
humildemente te suplicamos, que los que hoy nos regocijamos en la tierra con su
memoria, algún día nos gocemos con su presencia allá en los cielos. Amén.
SEGUNDO
Dios te salve María, Vara florida, de cuya raíz salió la Flor del Campo, Divina Azucena de los Valles, Jesús: Dios te salve Hija del Eterno Padre, y Emperatriz de los ángeles; yo te alabo con estos obedientísimo Espíritus; y por ellos te suplico, que corno cuidan de los Pontífices, Reyes y Príncipes, hagas que nos asistan por Ti, para la puntual obediencia a nuestro Santísimo Padre el Pontífice Romano, y que los herejes que la niegan, se rindan convirtiéndose en mansos corderos, y dejen sus errores, y nosotros demos el cuello al cuchillo, antes que faltar a tan debida obligación y á Ti obedezcamos, Señora y Abogada nuestra, agradeciéndote el habernos dado el bendito fruto de tu Vientre Jesús, para nuestra salvación, rindiéndote cultos de devoción, para amarte siempre en la Gloría. Amén.
TERCER
Dios
te salve María, Antorcha lucidísima, que alumbra a los hombres. Dios te salve
Madre de Dios Hijo, Princesa de los Principados, yo alabo con estos celosísimos
Espíritus; y por sus méritos te ruego, pues son superiores a los Ángeles y Arcángeles
en cosas pertenecientes a la salvación de los hombres, hagas que nos asistan para
hacer obras que nos guíen á eterna vida, y acertando el camino con su gracia, lleguemos
al Puerto de la Gloria. Amén.
CUARTO
Dios
te salve María, Diamante precioso del Corazón de Dios, que resplandece en la Ciudad
Santa. Dios te salve Esposa del Santo Divino Espíritu, Señora de las Potestades:
yo te alabo con estos Soberanos Espíritus, y por ellos re ruego, pues tienen
potestad paca refrenar a los Demonios, hagas que sujeten a los que nos combaten,
y coa su favor venzamos las sugestiones con que nos tientan, ejercitando las virtudes,
para ser coronados en la Gloria. Amén.
QUINTO DÍA
Dios
te salve María, Arca del mismo Dios, Acecido de Rosas del Jardín de Cristo, Purísima
Espora del Señor San José, Reyna de las Virtudes: yo te alabo con estos admirables
Espíritus, y por sus méritos te pido, hagas nos aprovechemos de los milagros que
Dios por su medio obra, y de los especiases con que nos favorece cada día, y con
su favor conozcamos las inspiraciones, que nos entibia para mejorar de costumbres,
y gozare en la Gloria. Amén.
SEXTO
Dios
te salve María, Luz que ilumina a todo entendimiento, para conocer el verdadero
sendero de la santidad. Dios te salve Hija del Santo, y mejor par Señor San Joaquín
y a mi Señora Santa Ana, Princesa de las Dominaciones; yo te alabo con estos providentísimo
Espíritus, y por sus méritos te suplico, pues presiden a los inferiores ministros
de la providencia, hagas que con su compañía domine mis pasiones, refrenando la
rebelión de la carne, para vivir constante, y con espíritu puro, gozar después de
esta vida las luces de la Gloria. Amén.
SÉPTIMO DÍA
Dios
te salve María, Vida de los Santos, alegría de los Ángeles y espanto de los
demonios. Dios te salve, Vid fructífera y mar de virtudes. Dios te salve vida y
emperatriz de los Tronos: yo te alabo con estos escogidos espíritus, y por
ellos te suplico, me otorgues, que a su imitación, sea Trono de Dios,
conservando mi alma sin la culpa que priva de tal gloria, y que sea mi vida
semejante a la de los justos, para ser agradable asiento a tan grande Majestad,
viviendo a las cosas eternas y muriendo al mundo y a mi mismo, para vivir en tu
compañía en la feliz patria de la Gloria. Amén.
OCTAVO DÍA
Dios
te salve María, Panal Virgíneo, que misericordiosamente endulzas las amarguras
de la muerte. Dios te salve, Tórtola amorosa, Dios te Salve, Reina de los Querubines:
yo te alabo con estos eminentes Espíritus, y te ruego, por sus perfecciones, me
alcances en mis obras, la perfección de ellas para agradar a Dios, y que en todas
me asistan, para que contigo la más eminente, y perfecta de todas las criaturas
adoremos a tu Hijo Santísimo en la Gloria. Amén.
NOVENO DÍA
Dios te salve María, Ejemplo de amor, que en amar a Dios perfectamente excedes a los Coros Angélicos, Santos del Cielo y Justos de la tierra. Dios te salve Templo de Pureza, Paloma candidísima, la más agradable a un Dios Trino y Uno. Dios te salve, Señora de los Serafines yo te alabo con estos abrasadísimo Espíritus, y te suplico por su amor que hagas nos asistan, para que a su imitación no cesemos un instante de amar a quien por amarnos dio la vida en el Árbol de la Cruz, para que vivamos crucificados con su amor siendo nuestra vida amarle, y ofenderle muerte, y que á Ti, amorosa María, que tanto le amas, te sigamos muriendo por amarle y por amarte a Ti, y entregando nuestras almas en tus manos, en ellas hallemos el tesoro de amarle siempre en fa Gloria. Amén.
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