jueves, 27 de agosto de 2020

ADORACIÓN DE LAS LLAGAS

 

ORACIONES DE SAN CLARA DE ASÍS EN HONOR DE LAS CINCO HERIDAS DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO

 

A LA HERIDA DE LA MANO DERECHA

¡Alabado sea y gloria a ti, Señor Jesús! por la herida santísima de tu mano derecha. Por esta sagrada plaga, perdóname todos los pecados que he cometido contra ti en pensamiento, palabra y obra, por mi negligencia en tu servicio y por las sensualidades de las que he sido culpable, ya sea por mirar o por durante mi sueño. Permíteme guardar un recuerdo piadoso de tu muerte y de tus sagradas heridas, y que te demuestro mi gratitud volviéndolas en mi cuerpo a través de la mortificación. ¡Concédemela, tú que vives y reinas por los siglos de los siglos! Que así sea.

Padre nuestro y Ave María

 

 

A LA HERIDA DE LA MANO IZQUIERDA

¡Gloria y alabanza a ti, dulce Jesús! por la santísima herida de tu mano izquierda. Por esta sagrada plaga, ten piedad de mí y quita de mi corazón todo lo que allí te desagrada. Dame la victoria sobre los enemigos acérrimos que me hacen la guerra, lléname de tu fuerza para que pueda pisotearlos, líbrame por tu muerte misericordiosa de todos los peligros a los que están expuestas mi vida y mi salvación. y dignos de hacerme digno de compartir tu gloria en tu reino, oh tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Que así sea.

Padre nuestro y Ave María

 

 

A LA HERIDA DEL PIE DERECHO

¡Alabado sea y gloria a ti, buen Salvador Jesús! por la santísima herida de tu pie derecho. Por esta sagrada herida, hazme merecer mi perdón por una penitencia proporcional al tamaño de mis faltas. ¡Oh! Te imploro con tu muerte, mantén a tu pobre sierva unida a tu voluntad, y mantén su cuerpo y alma de toda adversidad. Cuando llegue el día terrible, recibe mi alma en tu misericordia y dale alegrías eternas, oh Señor, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Que así sea.

Padre nuestro y Ave María

 

 

HERIDA DEL PIE IZQUIERDO

¡Alabado sea y gloria a ti, oh Jesús misericordioso! por la herida santísima de tu pie izquierdo. Por esta sagrada plaga, concédeme la gracia de una indulgencia plena y total, para que con tu ayuda evite la venganza que ejercerás en tu juicio. ¡Te lo pido por tu santa muerte, oh Jesús misericordioso! para que antes de morir reciba el sacramento de tu cuerpo y tu sangre, con la confesión de todos mis pecados, perfecta contrición y completa pureza de cuerpo y mente. Que finalmente reciba el sacramento de la extremaunción para la vida eterna. ¡Escucha mi oración, Señor, que vives y reinas por los siglos de los siglos! Que así sea.

Padre nuestro y Ave María

 

 

EN LA HERIDA DEL COSTADO

¡Alabado sea y gloria a ti, oh amado Jesús! por la plaga santísima de tu lado. Por esta sagrada plaga, y por esta inmensa misericordia que has mostrado al querer que tu costado esté abierto, y que te estás desplegando a favor de todos nosotros, después de haberlo comunicado primero al soldado Longino, te lo ruego, oh muy -dulce Jesús ! que no te basta con haberme purificado por el bautismo del pecado original, sino que todavía te dignas librarme de todos los males pasados, presentes y venideros, por los méritos de tu preciosa sangre, que ahora es ofrecida y recibido en todo el universo. Por tu muerte tan llena de amargura, concédeme fe viva, esperanza inquebrantable y perfecta caridad, para que pueda amarte con todo mi corazón, con toda mi alma y con todas mis fuerzas. Afírmame firmemente en el bien, para que pueda perseverar valientemente en tu santo servicio y agradarte ahora y siempre. Que así sea.

Padre nuestro y Ave María

 

L/: Te adoramos, Jesucristo, y te bendecimos.

R/: De lo que redimiste al mundo con tu muerte y tu sangre.

 

ORACIÓN: Dios Todopoderoso y Eterno, que redimiste a la humanidad con las cinco llagas de tu Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, concédenos, te suplicamos, que después de haber honrado estas mismas llagas cada día, que, por los méritos de su sangre y su muerte, evite la muerte súbita y eterna. Te lo pedimos por este mismo Señor Jesús, que vive y reina contigo por los siglos de los siglos. Que así sea.

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