TRECENARIO DE LA BEATA CATALINA TOMÁS
Canonesa de la Orden de S. Agustín en el
Monasterio de Religiosas de Santa María Magdalena de la Ciudad de Palma en el
Reyno de Mallorca, en donde se venera su cuerpo.
Compuesto por un devoto suyo, el que lo da
a luz para mayor gloria de Dios, aumento de devoción a la Beata, y
aprovechamiento de los fieles.
Año de 1801
MODO
Se confesará y comulgará el devoto, y con esta previa disposición dirá las Oraciones siguientes, puesto de rodillas delante de una Imagen de la Beata o de su Santo cuerpo.
ACTO DE CONTRICIÓN
Señor
mío Jesucristo, Padre amoroso de las almas, que tan benignamente recibes a los
pecadores que contritos y humillados llegan a tus pies, confiado yo en esta
promesa vuestra que no me puede faltar, acudo hoy a lavarme de mis manchas para
que así logre vuestra divina gracia, que necesito para ir a la gloria y para que
por la intercesión de vuestra sierva fiel la Beata Catalina Tomás con siga el
favor que os suplico en este Trecenario, si es de vuestro agrado. Amén.
ORACIÓN
Misericordiosísimo Señor, que con tan singulares prerrogativas dotaste a la Beata Catalina Tomás en su maravillosa vida y muerte. Haced que con tan peregrino modelo seamos sus verdaderos imitadores, para que así nos corones en el cielo. Amen.
DÍA PRIMERO
ORACIÓN
Alabemos a la Beatísima Trinidad, que llenó de tan grandes deseos de servir a Dios a la Beata Catalina Tomás, y que los cumplió con la mayor perfección en toda la carrera de su vida, despreciando las vanidades terrenas, y aspirando solo a las eternas dichas; los favores y gracias que cotidianamente recibía de su divina Majestad, le avivaban más sus deseos. Si somos verdaderos imitadores de la Beata Catalina, y desimpresionamos nuestros afectos de la vanidad, seremos colmados de divinos dones, y juntamente por su intercesión le acompañaremos en la gloria. Amen.
Se
rezarán trece Padre nuestros y trece Ave Marías, y trece Gloria Patris a la
Beata Catalina Tomas por cuya mediación se suplicará por el favor que el devoto
necesitare.
DÍA SEGUNDO
Oh
Beata Catalina Tomás, dignísima hija del gran Padre de la Iglesia S. Agustín, que,
habiendo sido tentada del enemigo común con tan raras y extraordinarias estratagemas,
ya para que desases de seguir el santo propósito de acogerte al sagrado Orden a
que aspirabas, y ya para que en tan gran puerto naufragases, te ruego Bendita
Catalina me apartes de los' precipicios del mundo, y que corrija enteramente
por tu intercesión poderosa mis pasiones, para que llegue con tal especial
Patrona al puerto deseado de la celestial Jerusalén, a fin de alabar en él
eternamente a mi Dios. Amén.
DÍA TERCERO
Consideremos
qué grata es la Oración a Dios á vista de la voz del cie lo que oyó la Beata
Catalina, con la cual quedó asegurada dé que serían sus deseos ciertos en
acogerse al sagrado á que aspiraba, y aunque tuvo sus obstáculos para
conseguirlos, Dios hizo ver por ellos y su constancia, que le eran muy aceptos
aquellos deseos. Haced Virgen bendita que oremos tus devotos con fe viva, y disposición
competente, para que nuestros deseos siendo arreglados sean conseguidos por
vuestros méritos é intercesión, y que nos alivies en nuestros trabajos, nos des
conformidad en ellos, hasta que por estos favores y protección te veamos en el
cielo. Amén.
DÍA CUARTO
Alabemos
al Señor en su bendita Sierva la Beata Catalina Tomás, viéndola tan favorecida
de su Esposo Jesucristo que le fue revelado en qué Monasterio había de ser
Religiosa, gracia concedida a pocas de las que siguen esta vocación, con lo que
se hace ver lo escogida que era la Beata Catalina del buen Jesús, y que sus méritos,
y disposición eran completos para desempeñar tan ardua empresa como tomaba.
Haced fidelísima Virgen que tus devotos conozcamos nuestras culpas, y que, por
tus ruegos y poderoso influjo con el Rey de los Reyes, las expiemos y seamos
conducidos a la corte celestial, para cantarle el Santo, Santo en vuestra compañía,
por eternidad de eternidades. Amén.
DÍA QUINTO
Consideremos
a la Beata Catalina Tomás buscando medios para que fuese menospreciada su
persona, siendo tan digna de todo aplauso, queriendo la tuvieran por rustica y
grosera, elevando así su humildad a un grado muy alto: con cuyo ejemplo nos
enseña esta Virgen Santa el poco mérito que debemos hacer de la ciencia,
dignidades, y otras prerrogativas vanas, y que solo seremos ensalzados siendo
humildes, y procurando seguirla en esta virtud privilegiada, y tan precisa para
desterrar el amor propio, y sus adyacentes. Haced gloriosa Santa que seamos
humildes de corazón, y que con este don logremos la gracia del Señor por vuestra
intercesión poderosa, para que así consigamos la eterna felicidad. Amén.
DÍA SEXTO
Alabemos
al Señor en su fiel Esposa la Beata Catalina Tomás, al ver la tan constante en;
seguir el estado Religioso, y por más ardides que el Demonio inventó para que
no consiguiese tan seguro camino para salvarse, le venció valerosamente en
todos ellos, aumentando así sus excelsos méritos: con lo que nos manifiesta la Beata
Catalina que debemos hacer un firme propósito de seguir el camino de la virtud,
huyendo de las sugestiones diabólicas, implorando los auxilios del Padre de las
almas, y de su bendita Madre, que les tendremos prontos a todas horas que los
pidamos con la disposición debida, así dejaremos burlado a nuestro enemigo
común, y lograremos el triunfo merecido, y juntamente con la Beata Catalina
daremos alabanzas al Señor por eternidades en la gloria. Amen.
DÍA SÉPTIMO
Consideremos
con admiración como la Beata Catalina Tomás a los veinte y cinco años de su
edad padeció grandes trabajos interiores, que los causaba el Demonio,
afligiendo con ellos el corazón de esta bendita Virgen por todos los términos
que su infernal astucia le sugería y más la fiel Esposa de Jesucristo constante
siempre en la santa ley, valiéndose de la señal de la cruz en algunas ocasiones,
y en otras invocando el dulcísimo nombre de Jesús, salía victoriosa de los
infernales ataques del común enemigo, lo cual servirá de modelo a los devotos
de la Beata Catalina para no desmayar en las tentaciones que el Demonio les
presente, valiéndose de la señal de la cruz, y del dulcísimo nombre de Jesús
para ahuyentarlas, y con este seguro método lograr una vida irreprehensible, y
fundar una sólida esperanza en que venciendo las tentaciones seremos compañeros
en la gloria de la Beata Catalina Tomás, y juntamente por su intercesión. Amen.
DÍA OCTAVO
Consideremos a la Beata Catalina Tomás cuán maltratada la pusieron los Demonios en cierta ocasión, que, quebrándole una costilla, y magullándole la cabeza, y dándole terribles golpes, la dejaron cuasi muerta, más la bendita Sierva del Señor llevaba estos tormentos con singular constancia, tal que mereció que S. Cosme, y S. Damián la visitasen, y curasen de sus heridas, acompañándolos Santa Catalina Mártir, favores muy particulares del cielo, que dan a entender que si llevamos con resignación y paciencia las adversidades de esta vida, seremos consolados de los Santos de nuestra devoción, los que contribuirán con la Beata Catalina Tomás a que seamos remunerados en la gloria. Amén.
DÍA NOVENO
Alabemos
al Señor en su bendita Esposa la Beata Catalina Tomás, al ver el peregrino
prodigio de haberla enviado el cielo un pan de azúcar por Santa Catalina Mártir,
cosa singular. Ciertamente, y que acredita la caridad de esta Sierva bendita,
que para socorrer a sus hermanas Monjas, y no para sí, lo pidió al Señor, con cuyo
documento nos deberemos ejercitar en la caridad con nuestros prójimos de todos
los nodos posibles, para que así, y por el valimiento que delante de la Santísima
Trinidad tiene la Beata Catalina Tomás, tengamos la felicidad de usar del
azúcar celestial en su compañía por eternidades en la gloria. Amén.
DÍA DÉCIMO
Consideremos
los grandes beneficios celestiales que recibía de su Esposo Jesucristo la Beata
Catalina Tomás, viendo varias cosas admirables de las que pasaban en diversas
partes del mundo y entre ellas algunos peligros eminentes que amenazaban a muchos
los que eran avisados por la bendita Sierva del Señor para qué los precaviesen.
Haced, Protectora mía, que yo vea mis riesgos y culpas sin obstáculo alguno, y
que haga una verdadera penitencia de ellas, para qué limpia mi alma, goce por
eternidades al Sol de Justicia en vuestra compañía. Amén.
DÍA UNDÉCIMO
Alabemos
al Señor al ver la pureza de su Esposa la Beata Catalina Tomás, espejo
clarísimo en que no hubo mancha que lo obscureciese, por lo cual obtiene el
alto título de Virgen, y aunque el infernal enemigo le tramó las trazas más
exquisitas para perderla por este enemigo, nunca, pudo conseguir avances en sus
repetidos ataques, porque la bendita Sierra del Señor se defendía con valor, y
usaba las armas celestiales, con las que salió siempre victoriosa. Haced Beata
Catalina que yo resista como vos las tentaciones carnales que el enemigo común
me presente, y que triunfando de él en todas ellas por vuestra poderosa intercesión
merezca poseer la bienaventuranza, alabando a la Beatísima Trinidad por
eternidades. Amén.
DÍA DUODÉCIMO
Consideremos a la Beata Catalina Tomás ya próxima a dejar este miserable valle de lágrimas para ir a gozar de los eternos contentos, en cuya ocasión un pajarito muy lindo le iba a cantar a sus manos suavísimamente, significándole que su alma había de volar presto al cielo a unirse con su amado Jesús, o si fuera mi felicidad tanta, bendita Virgen, que por vuestra intercesión conociera cuando había de morir, para preparar mi espíritu a imitación vuestra, más siendo la muerte cierta, y su hora a solo algunos justos revelada, qué hago que no estoy prevenido para que con confianza pueda prometerme el veros en la gloria. Amen.
DÍA DÉCIMO TERCERO
¡Oh feliz transito! ¡Oh dichosa Catalina! muchos fueron los trabajos en vida, muchas tus aflicciones, más fueron sin número los favores que recibiste de tu amado Esposo hasta coronarte de gloria. Yo espero que por vuestros muchos méritos é intercesión corrija mi vida, viva santamente, y tenga una muerte feliz, que es a lo que debo aspirar, así lo deseo, y os lo suplico humildemente, para que así os acompañe ante la Trinidad Beatísima por eternidades. Amén.
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