NOVENA
A LA SANTÍSIMA VIRGEN DE FONTANELLATO
I
Dulcísima
Reina del Santo Rosario, que desde tu Imagen Milagrosa de Fontanellato llenas
de alegría a tus fieles con las gracias incesantes que hundan tu corazón
materno; Humillo a tu hijo, te lo ruego, por las inefables dulzuras que nos
permites meditar en las meditaciones alegres de tu Rosario, escuchar con
compasión mis invocaciones, ayudarme en las dificultades e infundir en mi
corazón la santa alegría de la perenne gratitud hacia tu bondad materna.
Padre
Nuestro y Ave María.
II
Misericordiosa
Reina del Santo Rosario, que desde tu prodigiosa Imagen de Fontanellato alivia
los dolores, seca las lágrimas, consuela la amargura, cura las heridas con
bálsamo celestial y silencia en sonrisas los lamentos y gritos de los
infelices; Humillo a tu hijo, te lo ruego, por los sufrimientos de Jesús que
nos permitas meditar en los misterios dolorosos de tu Rosario, para ayudarme
con compasión en las dificultades en las que me encuentro, para que, por tu
bondad, el mi angustia se convierte en cántico de alegría y acción de gracias
por tu misericordia maternal.
Padre
Nuestro y Ave María.
III
Gloriosa
Reina del Santo Rosario, que desde la benigna Imagen de Fontanellato esparció
los rayos de tu gloria sobre todos los hombres curando dolencias, consolando
desgracias y difundiendo las energías de la esperanza celestial en los
corazones; Humilde a tu hijo, te lo ruego, por los eternos esplendores de los
gloriosos misterios de tu Rosario, que dejes que un rayo de tu divina
generosidad descienda sobre mí, que me conceda las gracias que te pido y la
alegría de cantar en la tierra y en el cielo el himno de gloria a tu amor
maternal.
Padre
Nuestro y Ave María.
L/:
Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.
R/:
Y seremos dignos de alcanzar las promesas de Cristo.
OREMOS: Concede
a tus fieles, Señor Dios nuestro, disfrutar siempre de la salud del cuerpo y
del espíritu, y por la gloriosa intercesión de María Santísima, siempre virgen,
salvarnos de los males que ahora nos entristecen y nos conducen a la alegría
sin fin. por Cristo nuestro Señor. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario