TERCENA
DEDICADA
A NUESTRO PADRE SAN FRANCISCO DE ASÍS
Escrita
por un devoto que ha recibido especialísimos favores de nuestro amantísimo
Padre San Francisco
México,
Imprenta, Calle de Santa Teresa. Núm. 1.
Reimpreso, s. XX, año de 1902
ORACIÓN
Seráfico
y amoroso Padre San Francisco, por las cinco llagas que Jesucristo imprimió en
ti, y por aquellas hermosísimas palabras en que el Redentor del Mundo te
ofreció que nunca le faltaría el pan a la religión, te pido, amorosísimo Padre
y Señor nuestro, nos libres de los malos pensamientos, las malas palabras y las
malas obras, nos protejas en todas nuestras necesidad y nos libres de todos
nuestros enemigos, para que, por tu intercesión nos dediquemos al mejor
servicio de Dios, y logremos más tarde formar parte de su Santísima gloria por
los siglos de los siglos. Amén.
Padre
nuestro, Ave María y Gloria.
Luego se
dice lo siguiente:
JACULATORIA
Señor,
Dios de cielo y tierra,
Por nuestro
buen San Francisco,
Te pedimos
seas amparo
De todos
tus buenos hijos,
Que nos
salves de asechanzas
De todos
los enemigos,
Que la
religión conserve
Sus ejércitos
benditos,
Y que
el respeto se extienda
Para todos
los ministros
Que son
la guía de las almas,
Que acogen
tus ejercicios
Por toda
una eternidad
Por los
siglos de los siglos. Amén.
Se reza
un credo y la siguiente oración, que se varia en los tres días:
PRIMER DÍA
ORACIÓN
En tu
Santísimo nombre, Padre amorosísimo, venimos a pedirte por la intercesión de
nuestro amorosísimo Padre San Francisco de Asís, conceda a tus ministros, los
señores sacerdotes, la perseverancia de la fé y nos ampares en todas las
necesidades de la vida, no permitiendo a nuestros enemigos nos dañen o
perjudiquen, y haciendo que, en todos nuestros actos, estemos exentos de todo
perjuicio, para mejor servir a tu Divinidad, por los siglos de los siglos. Amén.
Se rezan cinco Padres nuestros, Aves Marías y Glorias.
INVOCACIÓN
Amoroso
San Francisco,
Privilegiado
de Dios,
De pecadores
amparo,
Del que
sufre, protector,
Del náufrago,
dulce guía,
Del enfermo,
salvación,
De la
mujer desvalida,
Amparo en
su dolor,
Y del
huérfano infelice
Su auxilio
y su protección.
Yo vengo
a ti, Padre mío,
Sin recelos
ni temor
A pedir
que me protejas
Con tu
santa intercesión.
Para pedir
al Eterno,
Que me
alivie en la aflicción
Que, en
estos duros momentos,
Aflige mi
corazón. Amén.
SEGUNDO
DÍA
ORACIÓN
Amorosísimo
Padre y Señor mío, benignísimo Creador del cielo y la tierra, te pido que, por
los terribles sufrimientos que entre nosotros padeció tu amantísimo Hijo, y por
los dolores que sufrió tu amantísima Madre, me concedas la gracia especialísima
que te pido en esta devoción, por los méritos de Nuestro Señor Jesucristo y la
valiosa intercesión de nuestro Seráfico Padre San Francisco de Asís, que
contigo vive y reina por toda una eternidad, por los siglos de los siglos. Amén.
Se rezan cinco Padres nuestros, Aves Marías y Glorias.
TERCER
DÍA
ORACIÓN
¡Oh
Santísimo Redentor de todos los mortales, y amantísimo Hijo del Eterno Padre y
de María Santísima! Por lo mucho que sufriste en este mundo por redimirnos y salvarnos
de la culpa y del horrendo pecado, te pedimos que intercedas con tu amantísimo
Padre, en unión del Seráfico y dignísimo San Francisco de Asís, para que, por
su gracia, nos conceda lo que le pedimos en esta santa devoción, así como nos
ilumine y guíe en este Valle de Lágrimas, donde su misericordia se hace sentir
en todas nuestras aflicciones, te lo suplicamos, Señor y Padre mío, por los
méritos de tu vida, pasión y muerte, y porque con el Padre, vives y reinas en
unión del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.
Se rezan cinco Padres nuestros, Aves Marías y Glorias.
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