jueves, 23 de diciembre de 2021

OFICIO PARVO DEL NIÑO JESÚS


OFICIO PARVO

 DEL AMABLÍSIMO Y DULCÍSIMO NIÑO JESÚS

 

EL QUE AME MI INFNACIA, EN LA MUERTE NO TENDRÁ TRISTEZA

 

RATISBONA

 IMPRENTA DE JUAN BAUTISTA LANG

1719

 

Traducción del Lic. Erick Galindo Del Cid, catedrático de Lengua Latina de la Real Universidad de San Carlos de Guatemala.

Año de 2021

 

 

A MATINES

 

L/: Abre ¡Oh Señor mis labios!

R/: Para cantar tus alabanzas.

 

L/: Inclina Señor tu oído y escucha mis oraciones.

R/: Y bríndame tu asistencia divina.

 

HIMNO

¡Oh Niño Jesús dulcísimo!

Seas infinitamente alabado,

Tu suavísimo Corazón afligido

Con ungüento calmas

y cuidas mi alegría.

Quien te ama se postra

con dulzura en el mar.

¿Quién no viendo tus muestras

de amor no te ame?

¿Quién por ti, hermanito,

nació por ti pobrecito?

 

L/: Niño Dios atrae a ti al pecador.

R/: Para que se libre de los lazos (del pecado) de Adán.

 

ORACIÓN: Oh Dios cuyo amor es tan fuerte que te obligó a convertirte en un Infante, danos tanto conocimiento de tu amor para que lo correspondamos con vivacidad, y con ello nosotros eternamente amarte, alabarte y bendecirte. Amén.

 

 

 

A PRIMA

 

L/: Inclina Señor tu oído y escucha mis oraciones.

R/: Y bríndame tu asistencia divina.

 

HIMNO

El Dios inmenso quería revestir

Al Infantito (al Niñito)

De pequeñez, ternura y suavidez

Al llegar a este mundo.

Para que pueda ser amado

Por todos, y fuere principalmente

Para los culpables o demandados.

De manera formidable

Nada menos que

El perdón de sus culpas.

Con ternura él nos mira,

Y esperanza nos brinda.

 

L/: Niño Dios atrae a ti al pecador.

R/: Para que se libre de los lazos (del pecado) de Adán.

 

(Se recita la oración de Maitines)

 

 

 

A TERCIA

 

L/: Inclina Señor tu oído y escucha mis oraciones.

R/: Y bríndame tu asistencia divina.

 

HIMNO

¡Oh Niño! cuya divinidad

Asombrosamente se oculta,

Sin embargo, las formas de deidad

Revelan tu belleza.

El rayo de luz divina

Del ojo se extiende,

Y mi corazón es transverberado

Por una espada.

¡Amor que dé el morir

Y la muerte que al cielo eleve!

 

L/: Al Señor recién nacido amemos.

R/: Que por el bien o conveniencia del hombre nació.

 

 

 

A SEXTA

 

L/: Inclina Señor tu oído y escucha mis oraciones.

R/: Y bríndame tu asistencia divina.

 

HIMNO

Lloro ¡Oh Niño! y río,

Riendo me veo obligado

A llorar cuando veo tus estrellas

Frente a mis ojos centellar.

El excelente candor de la púrpura

De las rosas entrelaza,

Y la luz brilla en la nieve

Y se confunde entre las virtudes.

Brillo que se riza entre los cabellos

Y que reclaman para sí

El corazón del Infante.

 

L/: Para que entonces la vida mitigues.

R/: Y nos seas favorable.

 

 

 

A NONA

 

L/: Inclina Señor tu oído y escucha mis oraciones.

R/: Y bríndame tu asistencia divina.

 

HIMNO

Cuando veo salir lagrimitas

De tus lindos ojitos Jesús,

con los cuales quieres lavar

las culpas, alegras mi corazón

con tus gestos, exultando de alegría

y la cera se consume.

 

L/: Dios, cuando llora el Niño.

R/: El amor se da en efusión.


 

 

A VÍSPERAS

 

L/: Inclina Señor tu oído y escucha mis oraciones.

R/: Y bríndame tu asistencia divina.

 

HIMNO

Con frecuencia mi corazón se agita,

Volviendo a sus faltas o delitos,

La virtud no deja que se quiebre,

La mente juega con los miedos,

Pero cuando pienso en el santo niño y su suave amor,

Las culpas son perdonadas

Pidiendo con insistencia se sacude el temor,

No me echa de sí sino me mira de manera favorable

 

L/: No quiero la muerte del pecador.

R/: Dice el Niño, fuente de amor.


 

 

A COMPLETAS

 

L/: Conviértenos ¡Oh Niño Querido o Amado!

R/: Para que así te podamos amar.

 

L/: Inclina Señor tu oído y escucha mis oraciones.

R/: Y bríndame tu asistencia divina.

 

HIMNO

El frio tu sofocas,

Eres el fuego divino

Que todo rigor incineras,

En mi nada ven

Y destruye mis temores,

Mi corazón arde en llamas,

Y de amor te abrigo,

De tus hijos no me apartes.

No me abandones

Y en la hora de mi muerte te tendré.

 

L/: Moviéndose en los confines de la tierra.

R/: Está el supremo bien entre los hombres.

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