DÍA
VIGÉSIMO CUARTO
EL
MILAGROSO NIÑO JESÚS DE PRAGA INFINITAMENTE PODEROSO
El
Niño Jesús de Praga se le presenta a la pública adoración, teniendo en su mano
todo el orbe, para que nos demos cuenta de su infinito poder, el cual consiste,
como enseña la teología, en poder hacer Dios todas las cosas que quisiere, y
que su infinita sabiduría ve que son posibles y que no encierran contradicción;
y toda esta potencia creadora no reconoce límite, lo mismo en cuanto al número
que en cuanto a la grandeza y perfección de las cosas que Dios tuviere por bien
hacer. Según esta doctrina de fe, podemos deducir como corolario de mucho peso,
que la omnipotencia de Jesús puede ejecutar todo cuanto la divina voluntad
puede querer. ¿Cuánta, pues, no ha de ser nuestra confianza al ver al Milagroso
Niño Jesús de Praga con sus deditos levantados y siempre en actitud de
bendecirnos y llenarnos así de sus celestiales bienes, y aun de los que con el
tiempo se acaban, sí es así nos conviene?
FUERZA
Y MÍSTICA UNCIÓN QUE DIOS HA COMUNICADO A LOS ESCRITOS DE SANTA TERESA
Hace
algunos años que cierto joven de la aristocracia madrileña, al terminar su
carrera en la Marina de Guerra, tuvo que realizar un largo viaje por el mar.
Cuando terminó de leer los libros que llevó para el viaje, pidió al Capellán
que le prestara uno de los tenía. El Capellán le presto el libro de la Vida de
Santa Teresa de Jesús. En un principio comenzó a leerlo con indiferencia y
frialdad pero poco a poco mientras iba leyendo. Su alma comenzó a
sensibilizarse y enamorarse de la vida de la Santa, su obra y su reforma por la
Orden de la Virgen. Fue así que su conversión fue tan severa, que cuando el
barco atracó en tierra fue a una Iglesia a confesarse y pidiendo deseos de
entrar a la Orden de los Carmelitas Descalzos y así lo fue, ya que fue gracias
a la vida de Santa Teresa, pues en ella entró, y en ella sigue actualmente,
haciendo mucho bien a las almas con su santa vida y doctrina.
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