VISITA DOMICILIARIA DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD
SALUDO
¡Oh Santísima Trinidad, Padre Hijo y Espíritu Santo, Dios infinitamente bueno y misericordioso, que no contento con habernos creado, redimido y santificado convirtiéndoos en dulce y amoroso Huésped de nuestras almas habéis querido venir a visitarnos y hacernos grata compañía durante este día! Henos aquí postrados ante vuestra devota Imagen deseosos de ofrecernos totalmente a vuestro servicio y de consagrarnos nuestras personas, nuestros afectos, nuestra casa, nuestros negocios, todo cuanto de alguna manera nos pertenece. Reinad, ¡oh Trinidad Santísima! en nuestras almas y reinad también en nuestro hogar, presidiendo nuestras reuniones bendiciendo nuestros trabajos, santificando nuestras alegrías y consolándonos en nuestras aflicciones. Y en estas horas venturosas en que de manera especial váis a estar con nosotros, dignáos iluminar nuestra inteligencia haciendo conocer a cada cual vuestra santísima voluntad, e inflamar nuestros corazones en vuestro santo amor, a fin de que en todos los momentos de nuestra vida cantemos el cántico eterno de glorificación que esperamos cantar sin fin en la eternidad, en compañía de Jesús y María y de los bienaventurados todos del cielo:
Santo, Santo, Santo, Señor Dios de los Ejércitos, llenos están los cielos y la tierra de vuestra gloria
(300 días de indulgencia cada vez).
Gloria al Padre, gloria al Hijo, gloria al Espíritu Santo.
(El Santo y Gloria se repiten tres veces).
DESPEDIDA
¡Oh Trinidad Santísima, Padre bondadosísimo, Hijo Misericordiosísimo y Espíritu Santo Amantísimo! Aquí nos tenéis postrados de nuevo ante vuestra devota Imagen para ofreceros nuestra adoración, reverencia y amor, y daros graci. por los singulares beneficios con que ciertamente nos habéis favorecido en este día. Perdonad nuestras desatenciones, las cuales no provienen, bien lo sabéis de mala voluntad, sino de nuestra fragilidad y de nuestra ignorancia. Adiós ¡oh Trinidad Santísima! pero no os vayáis sin bendecirnos: bendecid a esta familia, que cifra en amaros su mayor gloria; bendecid a los niños para que se conserven puros e inocentes, bendecida los jóvenes para que sepan vencer los peligros y obstáculos que opongan a su virtud los enemigos del alma; bendecid a los padres para que acierten a cumplir los sagrados deberes que impone su estado; bendecidos a todos, para que andemos seguros por el camino de la rectitud y de la justicia que nos conduzca a la gloria, donde sin cesar os cantemos, en compañía de Jesús y María y de todos los bienaventurados:
Santo, Santo, Santo, Señor Dios de los Ejércitos, llenos están los cielos y la tierra de vuestra gloria.
(300 días de indulgencia cada vez)
Gloria al Padre, Gloria al Hijo, Gloria al Espíritu Santo.
(El Santo y el Gloria se repiten tres veces).
Para toda clase de propaganda de la devoción a la SS. Trinidad, dirijose al R. P. Director del SECRETARIADO TRINITARIO Héroes de Brunete, 36. SALAMANCA
Con las licencias necesarias
No hay comentarios:
Publicar un comentario