DEVOCIÓN DE LOS MARTES A LA SEÑORA SANTA ANA

DEVOCIÓN DE LOS MARTES A LA SEÑORA SANTA ANA

Señora Santa Ana

Una limosna te pido

Y por tu Nieto querido

Guárdame en la semana

ORACIÓN

Dichosísima y felicísima Señora Santa Ana, que mereciste ser escogida, adornada y enriquecida de virtudes por el Altísimo Señor nuestro, tal cual se requería à la que había de ser Madre de María Santísima Dignísima Madre de Dios, que des de tu Santo Vientre heredó tus Santas Virtudes, que fueron sello, idea y dechado de las que como heredera tuya gozó y ejerció nuestra Purísima, y Santa Señora: yo te ofrezco estos tres Padre nuestros y tres Ave Marías, hoy Martes, día de tu nacimiento y tránsito, en memoria y reverencia de las tres Divinas Personas de la Santísima Trinidad, que fue quien enriqueció de dones y privilegios à tu santísima y venerable familia de Jesús, María, José, Joaquín, y Ana: Adoro tan soberano Miste rio, reverencio y agradezco con humildad de corazón tan maravillosas obras, y asimismo te ofrezco, Santa mía Señora Santa Ana, la luz de esta antorcha encendida, y te pido merezca por tu intercesión la luz Divina a mi entendimiento, para amar y servir à tu Santísimo Nieto: del cual me alcances, gloriosa Santa la gracia de no ofenderle, particularmente en materia grave, y me alcances, Santa Abogada mía, el fuego del amor Divino, poniéndome en perfecta caridad para con mis prójimos. Te pido, Santa mía, por la salud espiritual y temporal de mis Padres, Hermanos y Deudos, como por todos aquellos, que han sido en contra mía, en cualquier materia o quebranto; asimismo te pido por la Santa Iglesia, por nuestro Católico Rey, por todos mis Superiores, que en mí tienen dominio: y finalmente, Santa mía, el perdón de mis culpas, el aborrecimiento à todas ellas, el amor à la virtud, y la gracia de conseguir por tu medio, una buena muerte, para gozar la Bienaventuranza. Amén.

3 padres nuestros, Aves María y Glorias.

SALVE

Dios te salve, Ana divina

Que guardaste inteligente

Perla de tan alto Oriente

A ti, concha peregrina

A ti pido, mujer fuerte

Sagrada patrona mía,

Que con Jesús y María

Tu me asistas a mi muerte.

Ana, que por tu constancia

Eres la mejor Aurora,

Alcánzame, gran Señora,

El don de perseverancia.

¡Oh gloriosa Santa Ana que está llena de compasión por quienes te invocan y de amor por los que sufren! Agobiado con el peso de mis problemas, me postro a tus pies y humildemente te ruego que tomes a tu especial cuidado esta intención mía... Por favor, recomiéndala a tu hija, Santa María, y deposítala ante el trono de Jesús, de manera que Él pueda llevarlo a una feliz resolución. Continúa intercediendo por mí hasta que mi petición sea concedida. Pero por encima de todo, obtenme la gracia de que un día pueda ver a Dios cara a cara para que contigo, la Virgen y todos los santos pueda alabarle y bendecirle por toda la eternidad. Amén.

-       Jesús, María y Santa Ana, ayudadme ahora y en la hora de mi muerte.

-       Santa Ana ruega por mí.